En una escuela de Villa Elvira el canasto de basura desapareció, pero se sigue tirando la basura en el lugar. La situación está cerca de convertirse en basural.

   La queja de algunos vecinos sobre la acumulación de basura en 116 y 82, destino de las EP 125 y ES 77, se hizo escuchar en las últimas horas. En el lugar había un canasto que era utilizado desde la institución y por vecinos cercanos que se acostumbraron a dejarla en el lugar, a pesar, de que el viejo canasto de madera ya no está.

   Sobre la salida de 116 en del complejo educativo, un viejo canasto de madera era usado como reservorio para alojar las bolsas de basura que se generan a diario en el establecimiento. La demanda en el lugar se hizo importante porque la utilización de personas de ese punto de entrega lo convirtió en un canasto comunitario.

     Cabe destacar que, por allí, el servicio de recolección de habituales es a diario y de no habituales es de dos veces por semana. Existe un tercer paso de descartables.

   El paso del tiempo y el vandalismo provocó que el viejo canasto ya no esté y esto provocó que la basura se siguió dejando en el lugar. Cuentan vecinos cercanos a la Escuela que confirman esta situación y aclaran que “es mucha la gente que está pasando una situación económica delicada y revuelven lo que tiran del comedor escolar”.

    Como se aseveró anteriormente a raíz del aporte de fuentes cercanas a la comunidad educativa, existen vecinos cercanos que utilizaron por años el canasto de la escuela y, a partir de su desaparición, aún siguen dejando las bolsas de residuos en el lugar.

   Confirman vecinos que la recolección es habitual, aunque muchas veces perduran y se esparcen los residuos de las bolsas dañadas que desde la Delegación Comunal tardan en levantar debido a la intermitencia del barrido y limpieza en esa zona aledaña a Barrio Jardín.

    Es importante marcar, para finalizar, que este punto es una pequeña muestra de lo que ocurre en el lugar, debido a existen varios personas decididas a arrojar basura en cualquier lugar que han utilizado el nuevo barrio que allí se levanta para dejar deshechos en las esquinas.